Carta abierta de Corporación Femm al Movimiento Feminista de Bogotá
En el año 2011 decidimos dar un salto de gran importancia para nosotras ya que fue en ese periodo cuando empezamos con nuestra primera versión de una Escuela de Formación Feminista en Derechos Humanos totalmente autogestionada para la cual nos apoyó de Profamilia, a través de Elizabeth Castillo, con el préstamo de un salón para los sábados para poder realizar la Paideia Femm: Escuela de Derechos Humanos para Lesbianas y Mujeres.
De esa Escuela llamada Paideia versión 0.1 nacieron muchas alianzas, amistades y hoy seguimos en contacto con muchas feministas que estuvieron en el proceso completo y con otras que se sumaron a la Equipa de Voluntarias Femm. Desde el año 2011 hemos hecho Escuelas de Formación bajo diferentes nombres, con enfoques y metodologías distintas, toda vez que nuestro propósito siempre ha sido crear y recibir procesos de aprendizaje desde la diversidad y la pluralidad puesto que somos conscientes que es desde estos lugares donde podemos crecer y fortalecernos como feministas.
Muchas, CIENTOS de mujeres hemos pasado por las Cátedra Femm, por las Paideias virtuales, por las Paideias presenciales, por Diversípaz, por los Procesos de Formación en Paz (los hicimos en 6 localidades) y por la Escuela de Auto Formación Feminista. Todos los procesos han sido AUTOGESTIONADOS, menos los seis Procesos de Formación en las localidades que se desarrollaron en el marco de un convenio con la Secretaria de Gobierno.
Han sido muchas mujeres las que han llegado a Femm a través de nuestras convocatorias y algunas se han quedado militando en nuestra colectiva como voluntarias; otras han creado sus propias iniciativas organizativas; otras se han hecho amigas de las compañeras que constituimos la equipa nuclear de voluntarias, y es así como en Femm tenemos voluntarias que llevan más de 10 años acompañando las iniciativas de Femm como colectiva y trabajando con nosotras en temas de la Corporación.
Desde el año 2016 hasta la fecha tenemos el proyecto Escuela de Auto Formación Feminista Femm -en adelante EAFFF-, cuyo principal propósito es enamorar a las mujeres del feminismo y acercarlas a las bases conceptuales del mismo mediante exposiciones sencillas que permitan generar discusiones y debates constructivos para así llegar a la auto-revisión de las prácticas cotidianas.
La EAFFF se desarrolla a través de 12 sesiones los días sábados, donde algunas de las voluntarias que ya llevan tiempo en Femm y que quedan a cargo de la EAFFF, organizan grupos para exponer con las mujeres recién llegadas a quienes llamamos aspirantes (grupo 1: voluntaria y grupo 2: aspirantes), toda vez que esperamos que las aspirantes se vuelvan voluntarias cuando la EAFFF concluye.
Las convocatorias para entrar a la EAFFF son dos veces al año y las interesadas tan pronto nos hacen llegar a través de un formulario virtual su inscripción, reciben información de qué es Femm, nuestra hoja de vida, la metodología de la EAFFF y el Manual de Acuerdos Éticos que fue construido de manera colectiva a través de mesas de trabajo con las voluntarias. Toda esta información la damos ANTES de la reunión de inducción y la volvemos a compartir y a discutir en la reunión de inducción.
Nosotras apostamos por la educación popular en el feminismo, es por esto que la EAFFF es un espacio de reconocimiento de los saberes y de la experiencia vital de todas para formarnos en este maravilloso movimiento que nos ha salvado la vida a más de una de las integrantes de Femm. Este espacio construido desde el compañerismo y la AMISTAD, ha permitido que muchas de nosotras, las voluntarias, formemos redes de apoyo y que podamos contar con un un espacio seguro para las mujeres.
Todo lo anterior demuestra que lo que nosotras tenemos aquí, hace casi 12 años es un proceso, un proceso que nos ha demandado trabajo, esfuerzo, disciplina, constancia y dinero.
Por esto las voluntarias de Femm decimos: ¡Este proceso es nuestro y este proceso se respeta!
Las mujeres que estamos detrás de Femm (tanto las socias fundadoras como las voluntarias) somos quienes hemos impulsado la colectiva y la corporación con nuestra fuerza vital, con nuestro TRABAJO PROBADO, con nuestra constancia y con nuestros recursos económicos. Es por ello que por respeto a nosotras mismas y a las compañeras que ya no están vamos a defenderla y a mantenerla, porque ¡sí¡. Porque este proceso social llamado Femm tiene dueñas y nos cansamos de que bajo las prerrogativas de la horizontalidad y de la corrección política, se cometan abusos, atropellos y no exista respeto ni un reconocimiento mínimo por nuestra trayectoria.
Sería ideal que el ejercicio social y político que desarrollamos desde las organizaciones, colectivas, parches y movimientos sea llevado a la práctica desde un modelo de horizontalidad, pero desafortunadamente esa horizontalidad trae consigo sus tiranías, porque equipara a quienes recién llegan una organización y además no TRABAJAN en las actividades (toda vez que su papel se limita a soltar sus opiniones y puntos de vista en espacios físicos y en la virtualidad) con quienes llevamos años trabajando para mantener la organización.
Lamentablemente, en Femm acabamos de pasar por un periodo de aprendizaje con algunas de las “aspirantes” de la última versión de la EAFFF, quienes decidieron atender a la convocatoria, participar en la sesión de inducción, aceptar la metodología de la EAFFF y el Manual de Acuerdos Éticos.
Algunas de estas aspirantes - quienes se denominan a sí mismas feministas, y de las más admirables, iluminadas e incuestionables - llegaron a nuestra Escuela para co-habitar el espacio construido por nosotras hace años desde unos lugares de poder en los que ellas mismas se auto-erigieron como las sabias y las llamadas a hacernos entrar en razón.
Al comienzo de la EAFFF empezaron las interrupciones a las co-coordinadoras de la escuela quienes estaban a cargo de los primeros talleres, los señalamientos hacia las otras por no “saber” tanto como ellas, por no opinar como ellas, luego vinieron las intervenciones con brusquedad, la descalificación a las otras por no tener sus mismas bases teóricas, los explayamientos en la palabra al mejor estilo de los machos, para imponer su visión del feminismo, visión que parte de los señalamientos y la superioridad moral, y fue así como estas personas encontraron en la Escuela un espacio amigable y sin resistencia para darle rienda a sus protagonismos y expansiones egocéntricas.
Muchas compañeras voluntarias de Femm (las otras que estaban participando en la Escuela porque están en otras actividades) no estaban muy al tanto de la crisis que estas personas estaban influenciando, y fue así como empezó la división en Femm y lo más triste: la desmotivación de nuestras compañeras voluntarias que llevan años en Femm.
Varias compañeras voluntarias allegaron comunicados de renuncia, otras de queja, y al hacer el ejercicio de juntarnos para hacer la reflexión sobre lo que venían sintiendo, encontramos que en la Escuela y en el chat de la Escuela, se habían vuelto cotidianas prácticas como el juzgar a la otra desde una posición moral elevada (auto asumida), el ejercer la crítica sobre las opiniones y sentires sin ánimo constructivo, el amañar y tergiversar lo dicho por otra y otras compañeras, el incumplir con compromisos y echar la culpa a las demás de la organización, el querer imponer sus voces sobre las demás voces abusando del tiempo de las intervenciones (mansplanning), el utilizar el discurso acicalado de academicismos para discriminar y eliminar a las demás compañeras que llegan a la Escuela en un primer intento de acercamiento al feminismo, son algunos de los fenómenos vivenciados como consecuencia de la llegada de estas personas a Femm.
Al revisar los chats y recapitular las sesiones de la EAFFF, se evidencia que a estas aspirantes nada de lo que se hace en Femm, ni cómo funciona Femm (con una Coordinación General, dos co-coordinaciones de la Escuela y con comités por tarea o actividad), les parece bien. Sabemos que todo proceso está sujeto a críticas y mejoras, y bienvenido todo comentario, aporte y trabajo que no haga revisarnos, sin embargo, cuando estas aseveraciones se hacen a forma de indirectas en el chat, atacando una supuesta “verticalidad”, pues comprendemos que lo único que quieren es boicotear el trabajo de compañeras que llevan tiempo en la organización y que tienen roles o posiciones ganadas a pulso, así que toda indirecta y opinión que no venga respaldada con trabajo, no es más que un tóxico intento individual de eliminar el andamiaje de lo construido en colectivo.
La cercanía de estas personas en nuestro proceso instaló una desmotivación general en todas (en voluntarias y en aspirantes que no son de su talante) porque crearon una sensación de miedo a hablar, de miedo a disentir, de vergüenza por la manera en la que veníamos haciendo las cosas y hasta vergüenza por los vínculos que tenemos, lo cual causó bastantes ausencias, alejamientos y hasta renuncias de nuestras compañeras voluntarias.
Ahora entendemos porque es que van de organización en organización, ufanándose del “importante trabajo social que han hecho” sin permanecer ni dejar huella en ninguna parte donde se privilegie lo colectivo, porque si ellas no se logran imponer, sino dividen, sino cooptan gente pues atacan a la organización y a las mujeres que trabajan en ella. ¿Para qué cooptan gente? No sabemos, pero sí sabemos que no tienen la humildad, la generosidad, la entereza, la disciplina ni la fuerza para organizarse y liderar su propio proceso.
Nosotras no vemos posible militar y hacer activismo feminista en un lugar en el cual se le da más importancia a la satisfacción de las perversiones yoicas de algunas que al trabajo comunitario y al respeto. En efecto, una de las características que más nos enorgullecen de Femm es que nuestra equipa está integrada por mujeres de diversas razas, oficios, intereses, formaciones, experiencias, creencias y religiones. Es aquí de donde nosotras sacamos nuestra fuerza, el poder aproximarnos desde la amistad a mujeres distintas a nosotras nos permite ampliar nuestra visión de feminismo, nos permite abrir los ojos para cuestionarnos, desaprender y construir desde la diferencia.
Nosotras no queremos seguir expuestas a estas situaciones vividas como consecuencia de la llegada de estas personas, y hoy sábado 01 de junio, sin ambages las voluntarias declaramos personas no gratas en Femm porque son predadoras y destructoras de procesos sociales.
Femm no va por ahora a correr con la misma suerte de la Colectiva Feminista Juana Julia, donde un grupo de duras hacían un TRABAJO maravilloso hasta que llegó una feminista ególatra, narcisa y anhelante de poder que diezmó la colectiva, se apropió del proceso y lo destruyó sin más, sin rendirle cuenta a nadie porque ya había minado los ánimos de todas.
A todas las organizaciones, parches, colectivos, y movimientos les decimos:
No queremos que corran la misma suerte de la Colectiva feminista Juana Julia, no queremos que la pasen tan mal como la hemos venido pasando en Femm en estos 5 meses del 2019 por eso nunca olviden compañeras de la militancia feminista que: “La igualdad entre nosotras se llama TRABAJO: Igual trabajo, igual participación y esa es la democracia en nuestras organizaciones” *
*Nos lo dijo así Marta Restrepo López de la Red Feminista Antimilitarista de Medellín en una sesión de asesoría de nos donó a las voluntarias de Femm.
Las voluntarias de Femm reiteramos que:
¡Este proceso es nuestro y este proceso se respeta!
Para concluir informamos mediante el presente comunicado que:
- En Femm entendemos y celebramos los múltiples feminismos existentes y nos sabemos y nos reconocemos como una colectiva que le apuesta a uno de esos tantos. No estamos exentas de fallas y tenemos la mejor disposición para recibir la crítica, pero la exigimos con respeto y que provenga de mujeres que tengan trabajo comunitario a cuestas. No sólo un discurso teórico poco inclusivo, “me gustas”, “seguidores” y mucha producción de trinos.
- Femm, como organización comunitaria de mujeres diversas en la que convergen mujeres de diferente nivel académico, profesional, social, cultural y económico, seguirá centrando su trabajo en aquellas mujeres que no han tenido (por varias circunstancias) un acercamiento al feminismo, enfocándose en la autoformación y la politización de todas.
- Femm aplaude y alienta las iniciativas organizativas derivadas de nuestras escuelas feministas. Sabemos que no todas quieren hacer activismo, o no todas quieren después de terminada la Escuela, seguir militando en Femm.
- El espacio de reunión de las Voluntarias de Femm seguirá siendo el CAIDS Sebastián Romero, lugar en el que nos reunimos desde el año 2016 todos los sábados, lugar que hemos gestionado nosotras y que la Subdirección para Asuntos LGBTI a través de las coordinadoras de la Casa nos prestan en virtud a nuestro trabajo ético y constante, es por ello que toda iniciativa organizativa derivada de Femm debe conseguir su espacio de reunión.
5. En Femm, que está conformada por 25 voluntarias feministas, algunas de las cuales estaban padeciendo la actual Escuela de Auto Formación Feminista Femm, sentimos que nos debemos el cuidarnos. Esta versión 2019 de la Escuela para nosotras fue un espacio en el que no sentimos tranquilidad y fluidez, sino que fue un espacio tiránico, de violencia, de maltrato y de exclusión generado a raíz de las ansias de protagonismo de algunas de las aspirantes. Sentir que podíamos ser juzgadas por expresar cualquier punto de vista, por la manera en la que escribimos en un chat (no el contenido), generó en nosotras un miedo constante a vernos expuestas a que se tergiversaran nuestras palabras. Es por ello que las voluntarias de Femm en un ejercicio de lealtad para con nosotras mismas y entre nosotras mismas y como un acto de reconocimiento y defensa del valioso proceso que Femm ha realizado a lo largo de sus 12 años de existencia, decidimos CANCELAR esta versión de la Escuela de Auto Formación Feminista. Ese proceso lo rompieron algunas de las aspirantes y con ellas ya no hay posibilidad de diálogo porque son personas que consideramos nocivas para nuestra labor social y para el movimiento feminista.
No sentimos dolor por dar por terminada la Escuela porque Femm sigue, porque hay quienes aportan más que su opinión. Sentimos dolor de no poder divulgar el nombre de una de estas personas a quien la impunidad ha protegido, porque ha pasado por varios parches y colectivas, organizaciones, perfiles de twitter e Instagram de otras feministas, queriendo imponer su visión de todo, juzgando y señalando. Es una persona a quien sólo le interesa romper procesos. Y sí compañeras, el patriarcado también está entre nosotras.
A continuación, Firmamos las Mujeres Feministas que hacemos parte de la Equipa de Voluntarias de Femm y que participaron de estas conversaciones para llegar a estas resoluciones:
Alexandra Tapias
Natalia Rincón Beltrán
Estefanía Mancilla Romero
Diana María Prado (Voluntaria Fundadora)
Xiomy González (Voluntaria Fundadora)
Angélica Hernández Barbosa
Luz Dary Rodríguez Camargo
Tania Liliana Soriano Suárez
Diana Isabel Ramos Romero
Lia Zarith Lince Cruz
Berta López Estremera
Jessica Nayea Garzón Medina
Cristina González Hurtado (Socia Fundadora)
Milena Saldaña Méndez
Laura María Poveda Chicuazuque
Marcela Briceño Santiz
Claudia Adriana Duque Acosta
Juanita Andrade Rodríguez
Mary Luz Sepúlveda Guevara
Julieth Marcela Cadena
María de los Ángeles Rocha
Lorena Forero Otálora (Socia Fundadora)
Mireya García Peña (Socia Fundadora)
Luz Marina Correa Quiceno (Voluntaria Fundadora)